Claudio
Ferrufino-Coqueugniot
Despierto con
noticias de otro acto aberrante del Estado Islámico, ISIS, esta vez en Libia,
con la decapitación de 21 cristianos coptos filmada en video. ¿El pecado? La
infidelidad al sangriento profeta de esta religión maligna. Las víctimas eran
egipcios de extracción humilde que se habían trasladado al vecino país en busca
de trabajo. La ultraderecha islamista los secuestró en diciembre y acaba de
ejecutarlos. Días atrás paseaban en un pueblo iraquí a presos kurdos enjaulados
con la promesa de quemarlos vivos. Todo ante la inercia de Occidente que teme
intervenir y que cuando lo haga quizá sea tarde. El cáncer crece.
Me pregunto por
qué ISIS no ataca también rivales de Rusia o de China, sobre todo de este
último cuyo gobierno mal llamado comunista tiene sojuzgado por décadas al
pueblo uighur, a orillas del Takamaklán, el peor desierto del mundo, y más
cerca de sus hermanos en religión en Asia Central que de Beijing. Porque bien
saben que la reacción de aquellas dictaduras sería tremenda, sin
consideraciones humanitarias como las de Occidente. ¿Por qué no atacar a
Israel, el enemigo favorito? Israel con lo ocurrido en Gaza ha mostrado que se
defenderá a muerte: me matan tres, les mato dos mil. Riesgoso. Se ceban
entonces en rehenes, prisioneros, mujeres, niños y minorías. El profeta es
cauteloso. Y cobarde.
Turquía, supuesto
aliado, juega un papel ambiguo en el conflicto ya entre civilización y barbarie
(dejemos la letra chica de lado, y los antecedentes históricos que presentan el
origen de esta reacción). Ankara es un poderoso elemento en la zona y aunque se
la critica no se la quiere molestar. Por eso se es negligente con los kurdos y
su pedido de armas. Kurdistán se ha ganado el derecho a la autodeterminación
con sangre, cosa que no satisface al eterno enemigo turco. A pesar del olvido a
que se somete la cruenta lucha de esta etnia contra las huestes del califa,
Kobani ha sido liberada por combatientes mujeres y ahora los peshmergas se arremolinan
en torno a Mosul. Su triunfo cambia la geopolítica regional y en macabra lógica
(para Turquía) se cree que tal vez ISIS es mejor que un asunto que resultará
irreversible y duradero.
Las medias tintas
de Barack Obama suelen dorarse de combatividad. Pero desde un inicio ha sido
displicente en atacar a islamistas furibundos, o a Assad y en su momento a
Kadhafi. Boko Haram ha convertido el África Central en un feudo de sangre; lo
hace ISIS en el Oriente Medio. Cuando al fin se eliminó la lacra de bin Laden
ni siquiera se mostró su cadáver, por “respeto” al Islam, y se lo despidió bajo
estrictas reglas musulmanas respecto de los muertos. No se actúa así con un
asesino vil que debía haber sido expuesto en su miseria de pingajo y luego
tirado a los tiburones sin rito alguno. Que se molesten los que quieran, porque
de todos modos, la yihad islámica está en marcha y todos somos objetivos.
Esta guerra, con
la calidad que tiene, no se ha de ganar con remilgos. El califa y sus
seguidores han puesto las bases y debe actuarse igual. No hay prisioneros, o no
debe haberlos. Un combatiente de ISIS es o enemigo vivo en combate o enemigo
muerto. Hoy Dinamarca aprende su lección de reacoger en su sociedad a los
yihadistas que regresan de Siria. Aquí no hay redención, ni puede haberla. O se
actúa sin piedad o se asumen las consecuencias. El juicio histórico vendrá
después, pero es mejor ser juzgado encima de cadáveres que tenerlos como parte
del público.
Sé que me pongo
en posición parecida a la que ataco. No importa. Cada día se justifica el
extremo. Luego vendrá tiempo de análisis y de contrición; por ahora,
dentelladas de perro.
16/02/15
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Publicado en El Día (Santa Cruz de la Sierra), 19/02/2015
Brutal, crudísimo, sopapo d luces, Claudio, y q con toda seguridad muchos y muchas no van a entender. Pero tan atroz como cierto: "la yihad islámica está en marcha y todos somos objetivos..", ya no hay entonces, lugar para remilgos. La tesitura bestial del Islam -hoy demostrada en su peor amplitud- no deja lugar a pajeras consideraciones diplomáticas y menos humanitarias, porque d cobardes es el matar a mansalva, sobre seguro.. Extensamente repartida ya está esta peste; caben por ello, tb, radicales acciones locales d contingencia.. O se olvidan d su inmundo alá para quedarse y merecerse el respeto del país q los acoge, o a su casa: a seguir sus plegarias ofreciendo rezos y culo a la apestosa meca. A los otros, a los maricas q gustan d filmarse y matar inocentes, sí, hay q enviarlos pronto con su alá. Hasta ahí, la cosa es sencilla. Lo pavoroso, lo incomprensible, es la actitud d cobardes como obama: si pudiendo hacer saneamiento no lo hacen, pues estamos ante alcahuetas q simulan una abierta colusión, bajo ese por demás llamativo "respeto" al islam.
ReplyDeleteA cada quien proteger su espacio y su familia, con dentelladas d perro, con sus propios términos..; es lo q nos queda, caro amigo. Abrazos.
Qué más pueden esperar los pueblos acorralados como los kurdos. Obama, hace un par de días, ni siquiera habla de fundamentalismo islámico sino de terrorismo en términos genéricos. Y no es lo mismo, no señor. Acá hay una guerra nonsancta e igual debe ser la defensa. No sé si van a entenderlo. En momentos como este hasta el tenebroso Bibi (Netanyahu) parece cuerdo. Abrazos, Achille.
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