Claudio
Ferrufino-Coqueugniot
Igual a un
cáncer, además del fin de la izquierda latinoamericana como representación
popular, ha significado la ascensión del imbécil al trono de Venezuela. La
boliburguesía contenta; los nuevos y no ilustrados caballeros medievales
disfrutan los feudos. El dinero alcanza cifras impensables; una columnista del
Times decía que Bolívar había muerto pobre y Chávez rico. No es casualidad,
hablamos de dos cosas absolutamente distintas. Bolívar construyó un continente,
que se lo arrebataron de inmediato. El coronel destruyó un país pero consolidó
fortunas, la suya y la de los cercanos. Por un lado están los sueños; por el
otro el robo.
Pero no hay muerto
malo, dicen. Y al malo hasta lo han vuelto inteligente, brillante, capaz,
supremo. Sin comentarios, porque hay demasiados y no muy decorosos.
Se creería que
Brasil, siendo la potencia que es, habiendo entrado a un club privado de
gigantes, tendría otros criterios fuera de lo económico para juzgar su posición
frente a Venezuela. Pero Brasil sigue perteneciendo al gremio de los
arribistas, también de los arrimados, y no puede soslayar ese tercermundismo
que le pesa como condena. Pertenece todavía al grupo de “amigos”, aunque se vea
y se haya visto que estos sujetos no riman con decencia y menos con
transparencia (¡qué viva la democracia!). Las malas lenguas, por lo general
buenas, hablan de oscuridades y espectros, de maniobras y corruptela al más alto
nivel en Itamaraty. ¿Sociedades secretas con los ladrones de Caracas? ¿Dineros
compartidos con el kirchnerismo financiero? ¿Cuotas del narcotráfico donde
sabemos? No sé, solo que a Brasil le falta mucho para un nivel de pensamiento y
acción que condiga con su poder.
Sin entrar en
detalles de quiénes arribaron a los gobiernos de Honduras y Paraguay, Brasil y
los que lo secundan -o lo mandan- fue inflexible. La razón está en la falta de
peso, la pobreza de estos países. Al pobre hay que darle con todo. Al rico, así
sea un chofer dedicado al dramatismo barato de novelón, y no porque sea chofer
sino por serias deficiencias intelectuales, se lo apuntala. Luego de un
patético espectáculo en Lima, los borregos investidos se fueron en tumulto a
idolatrar al momificador. Estaban todos: el ilustre Morales, el hipócrita
Piñera, el dudoso Santos, la sonriente Roussef, izquierda y derecha anudados en
glorioso matrimonio. Incluso el supuesto anciano sabio, “el” Mujica, se bautizó
de ignominia.
Luego a
aguantar la perorata infame del novel presidente, el autocalificado obrero
(hasta ahora no he visto obrero rico, ni en Holanda). La suerte quedó sellada
pero ninguna deuda saldada. Queda para el futuro saber quién es quién, y tener
la certeza de que Brasil no tiene calidad, tal vez en cien años, para ser
potencia mundial con los revolucionarios en silla que continúan creyendo que es
ahora o nunca para llenarse los bolsillos. La suerte y las circunstancias los
excedieron: la izquierda no estaba capacitada para gobernar. Pensaron que
gobierno era asaltar las arcas, por lo que pueda venir.
Nunca, ni en el tiempo hippie de San Francisco, el Summer of Love, se oyó tanto hablar de amor como lo hace Nicolás Maduro. Tal vez juzgo mal y esté perdidamente enamorado, para lo cual tiene derecho. Pero ese dúo de temas que lo aflige, el difunto y el amor, han sobrepasado el límite. Que se decida, o va a gobernar o va a amar. Que aunque se pueda hacer las dos cosas, dudo que él haga bien ninguna. Y el espectro que lo acompaña, a veces en forma de pajarito, a veces no sé ni cómo, ya no tiene calidad ni físico para aconsejarlo. Está al otro lado del espejo y en él Maduro se refleja como una pésima pantomima. Valga para darnos cuenta dónde estamos y quién nos rodea.
23/04/13
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Publicado en
Puntos de vista (Los Tiempos/Cochabamba), 26/04/2013
Imagen:
Caricatura de la prensa brasileña
Brillante y corajuda lectura, como siempre, estimado Claudio. Se confirmaron los temores. Venezuela es un país de micos fácilmente condicionables. Se hunden en la más negra miseria y aún créen ver redentores en imbéciles de solemnidad. Allá ellos.
ReplyDeleteAbrazos, caro amigo.
Falsa solemnidad acentuada por los "camardas" que la avalan. Recuas, recuas por doquier en nuestra América.
ReplyDeleteSaludos. He leído su artículo y de verdad el mismo da asco. Ud., extranjero ¿cómo osa hablar de esa manera de nuestro gobierno, de nuestra Revolución? Ese artículo es una babosería estúpida, una seguidilla de insultos contra nuestra nación, contra más de 7.500.000 venezolanos que decidieron, para despecho de muchos, seguir en Revolución. A distancia es sabroso insultar, pero ¿por qué no se acercan y hacen lo mismo? No saldrían vivos... vaya a mascar coca... no tuvieran Patria de no ser por los venezolanos, por Bolívar y Sucre.
ReplyDeleteA mí me da lástima el artículo y su mirada miope. Eso no significa que no quiera seguir comentando sus interesantes escapes narrativos por los lares de Asia y Rusia.
ReplyDeleteApoyo todo lo que dice Juan M. Carrasco sobre este Claudio, en el tema venezolano. Me parece una cobardía la frase "Igual a un cáncer, además del fin de la izquierda latinoamericana como representación popular, ha significado la ascensión del imbécil al trono de Venezuela."
Pero no es la cobardía sino la miopía lo que me motiva a comentar. ¿"El fin de la izquierda latinoamericana"? ¿En momentos en que, con el superpoder de Brasil, se concilia con la izquierda ascendente en el resto de Sudamérica? Ahora que el socialismo moderado y cristiano, bolivariano, se convierte en el modelo con el que sustituir al Consenso de Washington, a la Economía de Libre Mercado, al Capitalismo Salvaje que denunció Juan Pablo II, al frenesí financiero con que la última de Nueva York casi llega a arruinar al planeta, que ni no es por la economía alemana como garantía del euro, estaríamos arruinados.
Venezuela se salvó de la debacle, al igual que las otras naciones sudamericanas de izquierda que siguen creciendo al 5% y tienen reservas (Chávez sacó el oro venezolano de los bancos de los adoradore$ de Mamón). ¡Hombrazo, valiente, ni el cáncer lo pudo tumbar!
No volverán a dominar Venezuela. Venezuela es soberana y se la respeta en todo el mundo, menos por los que están ya de rodillas.
¡Viva Chávez carajo! Pa'lante Venezuela.
Una pena el nivel. Felizmente no masco coca. Tengo mi propia opinión al respecto de la mal llamada hoja sagrada. ¿A qué viene la amenaza de no salir vivos? El mico que falleció se las daba de macho y terminó llorando de rodillas ante el crucificado ¡vaya marxista de opereta! Seguramente los otros 7 millones de venezolanos piensan lo mismo que yo. He visto figuras de asnos con el rostro de Maduro. Un año, le doy, al interfecto. Hay una cosa que se llama economía y que está por encima de los arrebatos y calorones. Una economía que destruyó el bocón y que va a cobrarse ahora. Hablen, insulten, finalmente es lo que hacen los chavistas. La hora sonó y el tiempo avanza. La historia de América Latina le debe mucho al gran Bolívar, pero es mucho más compleja que su figura. Para hablar hay que saber, y para saber, leer.
ReplyDeleteLOS VENEZOLANOS
ReplyDelete“Quizás no hubieran presentado una obstinada resistencia los habitantes del virreinato, si no hubiesen venezolanos. Cartagena se resistió hasta lo imposible por los venezolanos. En la derecha del Magdalena se han dado ya varias batallas a tropas organizadas por venezolanos; en la fragosa y estéril provincia de Antioquia han declarado ya dos veces la guerra a muerte y tienen los pasos fortificados por venezolanos. Santa Fe fue sometido y recibió las ideas sangrientas por los mismos que habían logrado partido con emisarios que enviaron de Caracas. Todo, Excelentísimo Señor, es obra de los venezolanos.”
Extracto de una carta del Gral. Pablo Morillo al Ministro de Guerra del Reino de España, Antonio Rodríguez Villa. “El Teniente General Don Pablo Morillo”, Editorial América, Madrid, 1920.
Exacto Piruja y Juanamanuela, toda ésta abyecta y descerebrada idolatría al rojo orangután (por fin con Diosito -al q le lloró como un vulgar marica-, pero q hombrazo fué!, q miliconazo mas valiente!! ja! solo un puto llorón, demostró ser) es obra d los venezolanos. Concurro, definitivamente concurro. Han hablado con gran inteligencia...Pero ni el cancer lo pudo tumbar??? Acaso todavia bendice el pajarito con caca sus cabezotas testarudas?? Tieso, hermosamente callado, y bien muerto y pudriéndose está, su colorido hombrazo!! En mis pagos comenzaron las gestas libertarias q luego aprovechó, oportunamente su Bolivar, tercos micos. Y quieren matar?? Pues vengan maricas!! A mano limpia y a trompadas, irán a lamer el necrosado traste de su Redentor marica. Vengan malditos, pero como hombres, no como orcos y orangutanes bocones. Aquí, desde mis pagos irán derchito hasta su Cdte. Pajarito. ja!
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